- ¡Alto ahí! Dame inmediatamente toda la pasta que lleves encima.
- ¿Cómo? ¡De
eso nada! Si quiere mi dinero habrá de matarme.
- Pero hombre,
¿quién te ha dicho que yo quiera matarte?
- Para quitarme
el dinero antes tendrá usted que usar esa pistola.
- Vale, de
acuerdo. A ver, convénceme de que no debo hacerlo.
- Tengo mujer
y dos hijos.
- Yo parienta,
tres críos y un periquito.
- Estoy desde
hace dos años en el paro, antes trabajaba de contable en una empresa que se
trasladó a Marruecos.
- Joder, ¡qué
casualidad! Hace más de tres años que no tengo curro; yo era albañil.
- Si no
consigo por lo menos cuatro mil euros en el plazo de una semana, nos
desahuciarán. ¡Malditos bancos!
- ¡Hijos de
puta! ¡Me cago en ellos! A nosotros ya nos tiraron a la calle hace seis meses;
ahora vivimos en una caravana robada.
- Mi madre
está muy enferma. No puedo comprar los medicamentos que necesita y que ya no proporciona
la Seguridad Social.
- ¡Qué me vas
tú a contar! Tengo un crío medio ciego, no me dan ninguna ayuda y estamos dos
años en lista de espera. ¡Políticos de mierda!
- Sí, tiene
usted toda la razón, ¡vaya gobernantes inútiles y vendidos! A veces me entran unas
insoportables ganas de suicidarme y mandarlo todo al carajo.
- Bueno, oye,
por favor, tranquilízate, mejor que no sigas. ¿No tendrás un par de euros?, así
nos hacemos unas cañitas y seguimos hablando.
- Hombre, si
solo son dos euros y deja de apuntarme con esa arma…
- Pero bueno,
¿no te has dado cuenta? ¡Si solo es una pistola de juguete que encontré en un contenedor!
Lo siento, perdona, es que estoy desesperado ¿sabes? Me llamo Paco.
- De acuerdo,
encantado, Paco. Le comprendo, pero entienda que me ha dado un susto. Mi nombre
es Eduardo.
- Disculpa
otra vez, Eduardo, mucho gusto. Y háblame de tú, colega. Mira, yo pago la
segunda ronda. Oye, ¿sabes que le tengo echado el ojo a otra caravana? He
pensado que luego te daré mis señas, por si al final os desahucian ¿qué te
parece?
Y los
hombres se encaminaron hablando amigablemente hacia el bar más cercano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario